Pensando en el tema que escribiría hoy, rebobiné los 3 meses anteriores y recordé emociones que quería cambiar, ocultar y si era posible olvidar por salud mental supongo...
Cuando todo realmente cambio, con el nacimiento de mi bebé, todas las emociones encontradas, el desgaste físico y psicológico iban dañandome. No era como todo el mundo lo describe como la mejor experiencia de tu vida, no veía por ningún lado lo lindo del momento todo solo fue dolor desde el día del parto así que me dije es cuestión de tiempo.
El apoyo de mi pareja fue de gran ayuda, tenerlo a mi lado por casi un mes, permitió que poco a poco fuera haciendome a la idea de que ya era mamá. Lo raro era eso, que a pesar de tener y ver a mi bebé en brazos no sentía "eso" que se supone sienten las mamás y eso me hacia sentir aún peor. Me sentia adolorida y estaba realmente cansada y en lo último que quería hacer era en atender a mi bebé así que todos esos meses sobretodo los dos primeros meses los pase con culpa y en automático tratando de no atormentarme con esas ideas y de acumular toda la paciencia posible, ya que a cada llanto que no podía calmar el estrés se incrementaba y solo deseaba que se calmara. Mi pareja al verme tan tensa como un globo que se esta inflando y que esta apunto de explotar, googleo esperando encontrar casos similares para consolarme creo yo, y acabar con mis fantasmas, encontró un post en el que resumía casi todo lo que yo había pasado, sentí que no era la única que atravesaba por esa situación así que me dio cierto alivio y consuelo.
Ahora ya a sus tres meses recién me siento realmente una mamá, que se emociona con cada gesto o sonido que emite, al ver ropa de bebé. Cada logro o avance en su desarrollo me enorgullece y cada dolor suyo me hiere (por ahora solo producto de las vacunas).
En resumen todas tenemos ritmos diferentes para sentirse plenas con su maternidad la mía llego con retraso pero llego (felizmente).
